De vez en cuando, a lo largo de la historia, sucede algo que trastoca por completo nuestra forma de vida. Me refiero a cosas que marcan un antes y un después, tales como la pólvora que transformó la guerra, o la brújula que transformó la navegación, la tecnologÃa de impresión para los periódicos difundiendo asà la información, la radio para la comunicación masiva, los antibióticos, la Revolución Industrial, internet, los teléfonos móviles ... entienden a dónde voy con esto. La llegada de las nuevas tecnologÃas han demostrado ser importantes fuerzas disruptivas que cambian por completo nuestra forma de hacer las cosas. Durante esos perÃodos de cambios, tuvimos que adaptarnos.
ImagÃnate si fueras el jefe de estado de un paÃs europeo en el siglo XIII / XIV. Todo el mundo estuviese hablando de la "pólvora negra" que se abrÃa paso a lo largo de la Ruta de la Seda a través del Medio Oriente. Te enfrentarÃas a dos escenarios: 1) Conseguir la pólvora y preparar a tus fuerzas armadas de inmediato, o 2) Enfocarte en el dÃa a dÃa de tu paÃs y olvidar por completo esta nueva arma. Evidentemente, ser de los primeros en adoptar la adquisición de la pólvora podrÃa darte una gran ventaja para tus constantes enfrentamientos con tus paÃses vecinos, pero, al mismo tiempo, si fueses el último en conseguir pólvora serÃas vulnerable y esto podrÃa tener consecuencias desastrosas para tu estado y tu gente.
Del mismo modo, si hubieses sido el propietario de una fábrica a finales del siglo XVIII, que fabrica bienes de consumo para vender en el Reino Unido y otros paÃses europeos. Tienes toneladas de competidores, pero tus trabajadores son hábiles y rápidos, lo que hace que sus productos sean superiores en calidad y precio. De repente, todos sus competidores están adoptando maquinaria que reemplazará el trabajo manual y les permitirá producir mucho más rápido que antes. Tus productos conservarán la calidad, pero el costo por artÃculo se reducirá drásticamente. ¿Qué habrÃas hecho? Si te rehusaras a adoptar maquinaria, te quedarÃas rápidamente fuera del negocio, ya que tus competidores habrÃan podido fabricar más rápido y más barato que tú. Si hubieses sido uno de los primeros en adquirir dichas máquinas, podrÃas haber superado a tus competidores con una ventaja inicial y dejarlos en bancarrota, haciendo asà crecer tu negocio más allá de lo que antes pensabas posible.
En la década de los 70, los directores ejecutivos de las empresas más grandes y rentables no utilizaban computadoras, Internet o teléfonos inteligentes en su dÃa a dÃa. Pero tuvieron éxito en ese momento. Puedes imaginar lo que hubiera sucedido con sus negocios sin adoptar la nueva tecnologÃa. Si los 90 no los destruyeron, seguramente los 2000 lo habrÃan hecho. Evidentemente, tuvieron que adaptarse. Y los que no lo hicieron hace mucho que ya no existen.
En este momento estamos viviendo una nueva era, la revolución de la IA que cambiará nuestra vida personal y profesional para siempre. La fuerza disruptiva de la inteligencia artificial tendrá implicaciones mucho mayores que la propia Revolución Industrial. Se dedique a lo que se dedique su empresa, y cualquier cosa que usted y sus colegas hagan todos los dÃas, seguramente cambiarán. En algunos casos, nuestros trabajos ya no existirán, al igual que pasó con el trabajo manual en las fábricas a finales del siglo XVIII y principios del XIX.
Al igual que con todas las tecnologÃas disruptivas del pasado, ahora tienes que tomar una decisión: 1) puedes adoptar la inteligencia artificial en tu negocio e iniciar inmediatamente el proceso de cambio, o 2) puedes descartar por completo la inteligencia artificial e ignorar el cambio que está trayendo. Esto es lo que puede pasar:
Si das el paso y gradualmente comienzas a adoptar la IA en varios aspectos de tu negocio, comenzarás a superar a tus competidores en formas que nunca pensaste que fuera posible. La IA evoluciona constantemente y esto nunca va a detenerse. Debes abordarlo como un cambio gradual pero constante. PermÃteme darte un pequeño ejemplo de cómo puedes comenzar con IA. Puedes adoptar técnicas de análisis predictivo con el objetivo de pronosticar con mucha precisión a futuro tu demanda. Los algoritmos analizarán todos los datos históricos de tu negocio, detectarán patrones y pronosticarán tus ventas futuras. Esta es una forma revolucionaria de preparar tu negocio para enfrentar estos cambios; dentro de una semana, 2 meses, 1 año. Ningún ser humano es capaz de pronosticar con tanta precisión como la inteligencia artificial. Esto es literalmente lo más cerca que puedes estar de ver el futuro, permitiéndote planificar mejor tu negocio en términos de adquisiciones, producción, inventario, ventas, presupuestos, financiamiento, etc. Las investigaciones muestran que quienes han adoptado este tipo de análisis están reduciendo significativamente sus costos y, en consecuencia, aumentando sus ganancias. Puedes encontrar un artÃculo rápido sobre este tema especÃficamente aquÃ: 8 razones por las que la previsión de demanda avanzada es fundamental para el éxito de tu empresa. Este es solo un pequeño ejemplo, pero tienes que empezar por alguna parte. Los cambios pequeños pero graduales que comiences a hacer te ayudarán a preparar mejor a tu organización para enfrentar a tus competidores en esta nueva revolución. Tus competidores actuales pueden ser agresivos y nuevos competidores están sumándose dÃa a dÃa, tienes que ir un paso por delante.
Si descartas completamente la IA como la fuerza disruptiva que es y te niegas a adaptarte al cambio, estarás ocupado apagando pequeños incendios en tu negocio todos los dÃas y perderás un tiempo muy valioso porque todos tus competidores habrán adoptado la IA de una forma u otra. Lamentablemente tu negocio quedará atrás y no tendrás ninguna posibilidad de competir contra los que ya implementan IA.
Esta es la cruda realidad que plantea la revolución de la Inteligencia Artificial. Implementa IA en tu negocio o acepta el hecho de que el mismo no va a sobrevivir. Aún no es demasiado tarde, pero pronto lo será. Empieza con algo pequeño y acepta el cambio constante como la forma de dirigir un negocio exitoso.
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